El Gobierno de la provincia de Buenos Aires anunció un aumento en la tarifa de energía eléctrica de hasta el 3,3% a partir de marzo, justificando la medida en el impacto de las decisiones del Gobierno Nacional. Sin embargo, el ajuste fue oficializado a través de la Resolución 120/2025, publicada en el Boletín Oficial bonaerense, dejando en evidencia que la administración de Axel Kicillof tiene la potestad de definir los valores que pagan los usuarios en el distrito.
¿Por qué sube la tarifa de luz?
Según el comunicado oficial, la suba responde a tres factores principales:
- Ajuste del precio mayorista de la energía establecido por Nación.
- Quita de subsidios para usuarios de ingresos bajos y medios.
- Actualización del Valor Agregado de Distribución (VAD), que impactará un 2,3% en la factura final de los usuarios residenciales.
Con el nuevo esquema tarifario, las facturas reflejarán los siguientes aumentos:
- Usuarios N1 (ingresos altos): pasará de $34.840 a $35.400 (+1,6%).
- Usuarios N2 (ingresos bajos con tarifa social): pasará de $20.900 a $21.600 (+3,3%).
El incremento comenzará a aplicarse con los consumos de marzo y se verá reflejado en las facturas de abril.
La estrategia de Kicillof: ajuste encubierto y culpas a la Nación
Pese a que el ajuste tarifario es una decisión de la provincia, el gobernador Axel Kicillof intenta trasladar la responsabilidad al Gobierno Nacional, señalando que la suba es consecuencia de la política energética de Javier Milei.
Sin embargo, la realidad es que cada provincia tiene autonomía para fijar sus cuadros tarifarios. La eliminación de subsidios a la energía es una medida orientada a sanear las cuentas públicas tras décadas de congelamiento artificial de tarifas, una estrategia que el kirchnerismo utilizó para sostener su modelo populista a costa de un déficit fiscal insostenible.
En lugar de reconocer que el modelo de subsidios fue una bomba de tiempo, Kicillof intenta presentarse como víctima, cuando su propio gobierno es el que define las tarifas en Buenos Aires y ejecuta el ajuste en el distrito.
Las obras energéticas en Buenos Aires: promesas incumplidas
El gobierno bonaerense anunció la ejecución de 51 obras energéticas, con una inversión estimada en $790.000 millones. Sin embargo, los avances son mínimos:
- Desde 2019, solo se finalizaron 12 obras.
- 4 están en ejecución.
- 3 en licitación.
- 20 en fase de proyecto.
- El resto sigue sin avances concretos.
Estos números reflejan que, mientras la provincia enfrenta constantes problemas en la calidad del servicio eléctrico, la gestión de Kicillof continúa sin brindar soluciones reales, utilizando el relato para encubrir la falta de avances.
Milei ordena, Kicillof victimiza
Desde su asunción, Javier Milei dejó en claro su objetivo de ordenar la economía y eliminar distorsiones que perpetúan el déficit fiscal. La actualización de tarifas es parte de este proceso de sinceramiento, que apunta a corregir años de políticas populistas que solo generaron crisis energética y endeudamiento.
Mientras Milei trabaja para equilibrar las cuentas del país, Kicillof continúa con la misma estrategia kirchnerista, aplicando ajustes en la provincia mientras culpa a la Nación. Sin embargo, la realidad es innegable: Buenos Aires aumenta tarifas mientras mantiene un discurso de oposición, evidenciando una vez más que el kirchnerismo prefiere el relato antes que asumir responsabilidades.