El gobernador de la Provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, anunció este viernes que Claudio «Chiqui» Tapia, presidente de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), será el próximo titular del directorio de la Coordinación Ecológica Área Metropolitana Sociedad del Estado (CEAMSE) a partir del 2 de enero. Este nombramiento representa un cambio significativo en la conducción del organismo encargado de gestionar los residuos sólidos urbanos del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA).
Un cambio de mando estratégico
Tapia asumirá el cargo en reemplazo de Mónica Cappellini, quien lideró CEAMSE durante los últimos años. Durante el anuncio, Kicillof destacó la gestión de Cappellini y subrayó la importancia de fortalecer la coordinación entre el organismo y la Provincia.
El nombramiento de Tapia no solo refuerza la relación política entre Kicillof y el presidente de la AFA, sino que también coloca a un dirigente con amplio reconocimiento público en una posición clave para abordar los desafíos ambientales y logísticos relacionados con los residuos del AMBA.
Un trasfondo político y deportivo
El retorno de Tapia a CEAMSE tiene un trasfondo político cargado de tensiones. Anteriormente, Tapia había ocupado la vicepresidencia del organismo en representación de la Ciudad de Buenos Aires, pero fue desplazado en octubre pasado por la administración de Jorge Macri, actual jefe de Gobierno porteño.
Este cambio fue interpretado como parte de una disputa dentro del PRO y un capítulo más en el enfrentamiento de Tapia con el expresidente Mauricio Macri, impulsor de las sociedades anónimas deportivas (SAD), proyecto que Tapia resistió abiertamente. Ahora, su regreso, esta vez como presidente de CEAMSE, se da en el contexto de una alianza más visible entre Tapia y Kicillof, consolidada tras la firma de un convenio para convertir el Estadio Único de La Plata en la sede del fútbol argentino.
Impacto en la relación Provincia-CABA
Desde la administración porteña de Jorge Macri, minimizaron la relevancia política de este nombramiento, señalando que el cambio de directorio fue un «proceso natural» tras la expiración de los mandatos. Sin embargo, la designación de Tapia como presidente de CEAMSE reaviva las tensiones entre la Provincia y la Ciudad, en un contexto donde la gestión de residuos y sus implicancias ambientales son puntos de disputa clave.
Un desafío ambiental y logístico
Tapia asume un rol estratégico en un organismo fundamental para la sustentabilidad del AMBA. En un territorio densamente poblado, la gestión eficiente de residuos representa uno de los principales desafíos ambientales. Su liderazgo será evaluado tanto por su capacidad para optimizar los recursos como por su habilidad para coordinar políticas con la Ciudad y los municipios del conurbano.
Con este movimiento, el gobierno de Axel Kicillof busca no solo fortalecer la gestión de CEAMSE, sino también consolidar una alianza política con un dirigente de alto perfil que trasciende el ámbito deportivo, marcando una nueva etapa en la intersección entre política y fútbol en la Argentina.