La sentencia, dictada por el Tribunal de Juicio N.° 1 de la capital correntina, quedó firme , estableciendo una pena de diez años de prisión para el acusado.
Fallo basado en pruebas contundentes
El STJ demostró que la condena estaba debidamente fundamentada y sustentada en pruebas suficientes . Entre los elementos valorados se destacó:
- El testimonio de la víctima , obtenido a través de una Cámara Gesell , procedimiento clave en casos de violencia infantil.
- Informes psicológicos y psiquiátricos , que evidenciaron el impacto del delito en la salud mental de la menor.
La decisión del tribunal reafirma la importancia de la prueba testimonial y pericial en casos de delitos sexuales contra menores, estableciendo un precedente en la jurisprudencia provincial .
Con este fallo, el máximo tribunal de Corrientes ratificó la validez de la sentencia original y cerró la posibilidad de nuevas instancias de apel.