En Estados Unidos y todo el hemisferio norte se transitan las últimas semanas del otoño astronómico, que finalizará el 21 de diciembre de 2025, cuando el solsticio marque el día más corto del año e inicie oficialmente el invierno boreal.
El último día del otoño será el sábado 20 de diciembre y el invierno comenzará el domingo 21 de diciembre con el solsticio. Así, se dará comienzo a la temporada más fría en Estados Unidos.
Según Time and Date, el solsticio de invierno 2025 ocurrirá el 21 de diciembre a las 09.03 (CST), o 10.03 tiempo del Este.
El otoño climático ya terminó en Estados Unidos. Esta medición, informó Met Office, se usa porque al definir temporadas como períodos de tres meses completos (septiembre-noviembre para otoño) es más fácil comparar estadísticas de temperatura y precipitación año tras año y trabajar con modelos climáticos.
El otoño meteorológico (o climático) en el hemisferio norte va del 1° de septiembre al 30 de noviembre.
El solsticio de invierno es el momento del año en que uno de los polos de la Tierra está más inclinado en dirección opuesta al Sol, lo que produce el día con menos horas de luz y la noche más larga del año en el hemisferio norte.
De acuerdo con Time and Date, ocurre porque el eje de rotación de la Tierra está inclinado respecto a su órbita, y en esta fecha el polo norte está más lejos del Sol, así recibe menos luz directa.
Así, este evento astronómico produce cambios en las condiciones meteorológicas tales como:
A pesar de que las horas de luz aumentan cuando termina el otoño, las temperaturas continuarán en baja en la mayoría de las regiones durante el invierno.
Esto ocurre porque tanto la Tierra como sus océanos no se calientan ni se enfrían de inmediato. Necesitan tiempo para ajustar su temperatura. Ese retraso en la respuesta térmica es lo que se conoce como desfase estacional.
Las estaciones existen debido a que el eje de la Tierra está inclinado y mantiene esa postura mientras el planeta orbita alrededor del Sol.
Esa inclinación del globo, de acuerdo con un informe educativo de la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA, por sus siglas en inglés), causa que un hemisferio reciba mayor cantidad de luz y calor, mientras el otro queda con menos radiación.
Cuando un hemisferio queda inclinado hacia el Sol, se registra la primavera y el verano. Por el contrario, si esta se orienta en la dirección opuesta, comienzan el otoño y luego el invierno.
Este proceso, que se repite todos los años, genera las variaciones climáticas propias del verano, otoño, invierno y primavera.