En medio de crecientes tensiones con los gremios aeronáuticos, el vocero presidencial Manuel Adorni informó que el Gobierno ha iniciado conversaciones con varias compañías latinoamericanas para entregarles las operaciones de Aerolíneas Argentinas, de continuar las “extorsiones” de los sindicatos. Este anuncio llega tras los recientes paros que afectaron a más de 40.000 pasajeros, impulsados por el sindicato de pilotos que lidera Pablo Biró, sindicalista vinculado a La Cámpora y en abierta confrontación con la administración del presidente Javier Milei.
Durante una conferencia en la que no se permitieron preguntas, Adorni criticó fuertemente las medidas de fuerza de los pilotos y otros gremios del sector, advirtiendo que el gobierno no permitirá que continúen afectando a los ciudadanos. Aunque no detalló cómo se implementaría la cesión de la aerolínea, Adorni dejó claro que el Gobierno está dispuesto a ir “a fondo” en su enfrentamiento con los sindicatos.
“En una empresa privada, si hacés un paro y complicás la operatoria, te echan. Queremos que ese destino lo tengan quienes complican la vida de miles de argentinos con estas medidas”, afirmó Adorni, refiriéndose a los pilotos. Además, recordó que Milei llegó al poder con la promesa de eliminar los piquetes y cortes de calle, y que ahora es el turno de acabar con los “piquetes gremiales” en el sector aeronáutico.
El gobierno también expuso los beneficios que, según Adorni, disfrutan los pilotos de Aerolíneas Argentinas: sueldos que llegan hasta los $10 millones, viajes en clase ejecutiva para ellos y sus familiares, remises a disposición que cuestan $1.000 millones al mes, y jornadas laborales considerablemente menores que el promedio de la industria. Adorni enfatizó que, en algunos casos, los pilotos vuelan solo tres veces al mes y reciben pagos adicionales por cualquier reprogramación.
Además, subrayó que los pilotos jubilados mantienen un descuento del 90% en pasajes de por vida y siguen cobrando bonos en dólares. Estos “privilegios”, afirmó Adorni, son una de las razones por las que ningún trabajador ha aceptado las propuestas de retiro voluntario.
La ofensiva del gobierno también incluye una denuncia penal contra el líder gremial Pablo Biró, acusado de extorsión y amenazas. Según Adorni, las huelgas como las que encabeza Biró podrían considerarse “salvajes”, por lo que el sindicalista debería actuar con precaución antes de impulsar nuevas medidas de fuerza.
El futuro de Aerolíneas Argentinas, una de las empresas estatales más icónicas del país, parece ahora más incierto que nunca, mientras el gobierno de Milei promete imponer “ley y orden” en medio de una creciente confrontación con los gremios del sector.
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