Un día después de la declaración como imputada de Laudelina Peña ante la jueza federal Cristina Pozzer Penzo, su hija, Macarena, opinó que “ahora mi mamá está contando la verdad, ya no es momento de mentir, porque tiene que aparecer Loan”, expresó.
Cabe señalar que la tía del niño desaparecido en paraje Algarrobal en 9 de Julio hace más de un mes fue la primera en responder a la testimonial como imputada por más de 5 horas, desde el Penal de Ezeiza, vía Zoom. “Para mí, Laudelina es la mejor mamá. Me duele mucho que hoy todo el foco esté en ella. Mamá siempre estuvo muy angustiada, me decía que tenía como un nudo en la garganta. Lo único que quiero es que se esclarezca el caso y que digan dónde está Loan”, remarcó ante el canal TN, donde enfatizó que fue ella quien encontró ese día el botín. “Eso puede verse en la foto que me sacó esa tarde mamá”, argumentó.
En otro orden de cosas, admitió que tiene miedo de quedar detenida por la causa de su primo, pero destaca que está “con la consciencia tranquila de decir siempre la verdad”. Sobre su relación con la pareja de su mamá, Bernardino Antonio “Capi” Benítez, señaló que “nunca lo tuve como figura de papá, la relación siempre fue hasta ahí nomás” y sobre Benítez, añadió que podría estar involucrado en la desaparición de su primo. “Puede ser, porque tenía antecedentes y por eso me da que pensar. A esta altura, ya no creo que mamá lo siga cubriendo. Yo creo que ahora sí mi mamá dijo toda la verdad, porque ya no es momento de ocultar cosas”, remarcó.
A su vez, sobre el llamado de 9 minutos entre Benítez y su mamá Laudelina el día en que desapareció Loan, opinó sobre la duración de la conversación diciendo que “es extraño”. Párrafo aparte merece su respuesta con respecto a María Victoria Caillava. “La conocía por su rol de funcionaria municipal. Ese sábado, antes del día del padre, ella me acercó hasta casa donde buscamos con mi hermanita dos frazadas para llevarle a Benítez que estaba ya preso en la Comisaría. Ahí anoté su número y me dijo cualquier cosa que le avise porque ella era como nuestra tía. Nunca me dio desconfianza”, admitió.
Y añadió que “empecé a desconfiar de ella con la pericia de los autos”, en referencia al día en que fueron detenidos Caillava y Carlos Pérez tras las pruebas de odorología y luminol en el Ford Ka y la Ranger. “En frío, me quedé pensando que nosotros estábamos buscando a mi primito ese día que se perdió y ellos, como si nada, volvieron al pueblo. Pensar que al buscar la frazada estaba en la camioneta con mi hermanito, si nos llevaban a otro lado, no sé qué hubiera pasado”, se preguntó.
Admitió además que cuando todo un país estaba angustiado con la desaparición de Loan, “Victoria fue a comprar una torta y un regalo para Pérez por el día del padre”.
En otro orden de cosas, Macarena se refirió a una situación peculiar. Contó que durante el tiempo en que cientos de efectivos buscaban al niño por los campos de la zona, se acercaron a hablar con ella el exministro de Seguridad Buenaventura Duarte y el jefe de la Policía, Alberto Arnaldo Molina. “Los dos me preguntaron cosas y me dieron sus números para que los llame por cualquier cosa”.
“Un día que iban a hacer un allanamiento hacia la Escuela 800, yo le hice un llamado al ministro de Seguridad, es un hombre alto de apellido Duarte. Ahí le pasé el teléfono y habló con mi mamá”, relató ante el canal bonaerense, aunque no brindó detalles sobre el motivo de la conversación.
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