En un evento organizado por la Conservative Political Action Conference (CPAC) en Mar-a-Lago, Florida, Javier Milei, presidente de Argentina, se reunió por primera vez con el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, marcando un hito en las relaciones bilaterales entre ambas naciones.
Un encuentro privado y gestos de camaradería
La jornada inició con una cena informal entre Milei y Trump, donde discutieron temas de interés mutuo, incluyendo perspectivas sobre la economía global, el comercio y la geopolítica. Este diálogo fue seguido por una interacción de Milei con el vicepresidente electo, JD Vance, fortaleciendo los vínculos entre las administraciones entrante y en funciones.
Durante el evento principal, Milei ofreció un discurso de cinco minutos en el que compartió su visión sobre los desafíos y oportunidades de la economía mundial. Su intervención fue destacada no solo por el contenido, sino también por la presencia de Trump entre la audiencia, quien lo elogió abiertamente.
“Make Argentina Great Again”
En un gesto sorpresivo, Trump expresó su admiración hacia Milei:
“Has hecho un trabajo fantástico en un periodo de tiempo muy corto. Es un honor tenerte aquí”.
El mandatario estadounidense incluso adaptó su famoso lema, señalando:
“Make Argentina great again. MAGA. He’s a MAGA person”.
Estas declaraciones resonaron entre los asistentes, consolidando la percepción de Milei como una figura afín a las políticas promovidas por Trump y al movimiento conservador internacional.
Interés de los donantes republicanos
La presencia de Milei atrajo la atención de importantes donantes republicanos, interesados en sus planteamientos económicos y políticos. Según trascendió, varios de ellos sostuvieron conversaciones con el mandatario argentino, mostrando curiosidad por sus propuestas y su enfoque disruptivo.
Un acercamiento estratégico
Este primer encuentro marca el inicio de lo que podría ser una alianza estratégica entre las administraciones de Milei y Trump, con potenciales implicancias para el comercio, las inversiones y la política regional. Con su visita a Mar-a-Lago, Milei refuerza su posicionamiento internacional y consolida una narrativa que busca proyectar a Argentina como un aliado clave en el escenario global.
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