En el marco de la Gala Inaugural Starlight, realizada en Union Station, Washington D.C., Javier Milei, presidente de Argentina, y Marco Rubio, secretario de Estado de Estados Unidos, coincidieron en su visión común sobre los desafíos de América Latina. La gala, organizada en honor a la asunción de Donald Trump y su vicepresidente J.D. Vance, congregó a líderes internacionales, figuras del espectáculo y destacados donantes de la campaña republicana.
Un frente común contra las dictaduras
El encuentro entre Milei y Rubio se centró en la situación de Venezuela, Cuba y Nicaragua, países señalados como «bastiones de autoritarismo» en el hemisferio.
- Venezuela bajo la lupa: Ambos líderes calificaron al régimen de Nicolás Maduro como «fraudulento y sostenido por redes de corrupción transnacional». Subrayaron la importancia de intensificar las sanciones económicas y promover una diplomacia firme para denunciar las violaciones sistemáticas a los derechos humanos.
- Cuba y Nicaragua: La discusión también abordó estrategias para debilitar a los regímenes autoritarios de Miguel Díaz-Canel y Daniel Ortega, enfatizando la necesidad de fomentar movimientos democráticos y fortalecer la cooperación internacional contra estas dictaduras.
Rubio destacó que la alianza con Argentina es clave para consolidar una agenda hemisférica de libertad y desarrollo: «Con líderes como Milei, América Latina tiene una oportunidad histórica de dejar atrás el populismo y la tiranía».
Una gala de alto perfil
La velada estuvo marcada por la combinación de protocolo y distensión, con invitados de renombre como Mike Tyson y Sylvester Stallone, quienes compartieron espacio con líderes políticos y económicos. A pesar del clima gélido, Milei destacó por su carisma y cercanía con los asistentes, tomándose más de 250 selfies y siendo comparado por algunos con una estrella de rock.
«Milei tiene una conexión única con la gente», comentó uno de los asistentes. «Es como Mick Jagger; todos querían una foto con él».
Relación cercana con Donald Trump
Antes de la gala, Milei asistió a una ceremonia religiosa en la iglesia Saint John, donde tuvo un encuentro breve pero significativo con Donald Trump. El presidente estadounidense saludó a Milei de manera cálida, mientras miembros de la familia Trump rompieron el protocolo para tomarse selfies con el mandatario argentino.
«Trump me saludó como a un amigo», comentó Milei sobre el momento, señalando que la relación entre ambos líderes podría marcar un nuevo capítulo en la cooperación entre Argentina y Estados Unidos.
Próxima parada: Davos
Tras el evento, Milei y su delegación oficial partieron hacia el Foro Económico Mundial en Davos, donde el presidente argentino presentará su visión del panorama global. Su discurso se centrará en el rol de Argentina como un aliado estratégico de la nueva administración estadounidense y en las oportunidades económicas derivadas de una mayor integración con el mercado global.
La Gala Starlight dejó en claro que la administración de Milei busca posicionar a Argentina como un actor clave en la defensa de la democracia en América Latina, al tiempo que fortalece su relación con la nueva cúpula de poder en Washington.