En una sesión clave, la Cámara de Diputados no logró revertir el veto del presidente Javier Milei sobre la reforma jubilatoria aprobada en agosto, a pesar de que la oposición obtuvo una mayoría de votos. Sin embargo, al no alcanzar los dos tercios requeridos, el sistema previsional continuará bajo el decreto presidencial que provocó amplias críticas. Afuera del Congreso, una masiva movilización de jubilados y sindicatos protestaba contra la medida, mientras sus consignas se escuchaban dentro del recinto.
La oposición consiguió 153 votos afirmativos, pero necesitaba 165 para revertir el veto, en una jornada que contó con la presencia de 248 legisladores. Por su parte, 87 diputados votaron en contra de la anulación del veto, y hubo 8 abstenciones. El resultado dejó en evidencia la fragmentación dentro del arco opositor, especialmente en la Unión Cívica Radical (UCR), que fue blanco de las críticas del peronismo por el cambio de postura de algunos de sus diputados.
El oficialismo consolidó su victoria tras las reuniones entre el presidente Milei y bloques aliados del PRO y la UCR, lo que inclinó la balanza a favor del Gobierno. La estrategia incluyó encuentros clave con legisladores de estos partidos, que resultaron determinantes para mantener el actual sistema previsional, pese a la fuerte oposición manifestada dentro y fuera del Congreso.
Durante el debate, el peronismo apuntó contra sectores de la UCR que, tras haber apoyado inicialmente la reforma, cambiaron su voto para respaldar el veto presidencial. También hubo reproches hacia los bloques que responden a algunos gobernadores, cuyos representantes optaron por alinearse con el Ejecutivo en esta votación. La tensión dentro del recinto fue palpable, con discursos encendidos que reflejaron el malestar de varios legisladores opositores ante lo que consideran una “traición” a los intereses de los jubilados.
El inicio de la sesión estuvo marcado por la asunción de la diputada entrerriana Nancy Ballejos, quien reemplazó al radical Pedro Galimberti tras su renuncia para asumir en la Comisión Técnica Mixta de Salto Grande. Ballejos, abogada y exfuncionaria del Ministerio del Interior durante la presidencia de Alberto Fernández, aún no ha definido si se unirá al bloque de Encuentro Federal o al PRO. Si opta por el PRO, la bancada “amarilla” se convertirá en la segunda fuerza más numerosa de la Cámara.
Otro punto de conflicto fue la falta de una reunión de Labor Parlamentaria, lo que provocó críticas hacia el presidente de la Cámara, Martín Menem. Los legisladores cuestionaron que no se hubiera establecido un cronograma previo para organizar las intervenciones, aunque finalmente consensuaron limitar los tiempos de cada discurso.
La movilización de jubilados y sindicatos que rodeaba el Congreso fue una expresión del descontento social frente a las políticas de ajuste impulsadas por el Gobierno. Los manifestantes exigían el restablecimiento de los derechos previsionales que la reforma aprobada en agosto les garantizaba, y acusaron al Ejecutivo de implementar un “plan de ajuste brutal” que afecta principalmente a los sectores más vulnerables.
Este fracaso para revertir el veto presidencial supone un duro golpe para la oposición, que ve cómo el gobierno de Milei sigue imponiendo su agenda, a pesar de la resistencia de buena parte del Congreso y de la sociedad. Mientras tanto, los jubilados y sindicatos prometen continuar con sus protestas, en lo que anticipa un clima de creciente tensión política y social en las próximas semanas.