La Justicia Federal ha dispuesto una pericia contable sobre el patrimonio de Cristina Fernández de Kirchner, como parte de una causa reabierta que investiga presuntas inconsistencias en sus declaraciones juradas. Esta decisión se suma al pedido de decomiso de 80.000 millones de pesos en la causa Vialidad, donde la expresidenta enfrenta una condena solidaria junto con otros acusados, mientras que su última declaración jurada revela un patrimonio de 250 millones de pesos.
El peritaje, solicitado por la Cámara Federal porteña, abarca un exhaustivo análisis de ocho puntos clave para esclarecer si hubo irregularidades en las declaraciones patrimoniales de la entonces mandataria durante sus presidencias (2007-2015). La investigación, que incluye bienes, empresas y deudas, se centra en posibles maniobras de enriquecimiento ilícito.
Un caso con antecedentes de archivo y reapertura
La causa había sido archivada en varias oportunidades por falta de pruebas, con los jueces María Eugenia Capuchetti y Julián Ercolini concluyendo que no existían elementos suficientes para imputar a Kirchner. Sin embargo, en 2024, la Cámara Federal aceptó un recurso presentado por la Unidad de Información Financiera (UIF) y ordenó su reapertura, delegando la investigación en el fiscal Gerardo Pollicita.
El expediente se enfoca en empresas como Los Sauces y Hotesur, así como en la declaración de bienes vinculados a Lázaro Báez y Austral Construcciones. Entre los aspectos a analizar, se destacan las diferencias en la valuación de acciones, deudas con sociedades controladas por Kirchner y la incorrecta declaración de bienes hereditarios tras el fallecimiento de Néstor Kirchner.
Inmuebles en la mira
La pericia incluirá un análisis detallado de varias propiedades, como una casa en Río Gallegos y terrenos en El Calafate. Entre ellos, destaca un inmueble permutado con Báez que fue utilizado para ampliar el hotel boutique «Casa Patagónica Los Sauces». Según la fiscalía, este bien fue declarado de forma tardía y presenta inconsistencias en su titularidad y valor.
Otro punto clave es un terreno de 87.000 metros cuadrados frente al Lago Argentino, también en El Calafate, valuado en 14,7 millones de pesos en 2016. Según las investigaciones, la expresidenta no declaró este bien a su nombre, sino al de su cónyuge, lo que genera dudas sobre la correcta exteriorización del patrimonio.
El crecimiento del patrimonio y las sospechas de lavado
Desde 2007 hasta 2015, el patrimonio de los Kirchner creció exponencialmente, pasando de 17,8 millones de pesos a 77 millones en solo dos años, según sus propias declaraciones juradas. Este aumento llamó la atención de la justicia, que apunta a que los hoteles y desarrollos inmobiliarios familiares habrían sido utilizados para simular fondos de origen ilícito.
En 2009, el matrimonio registró un incremento del 158% en su patrimonio en solo un año. Este fenómeno, junto con los vínculos con Lázaro Báez y las condenas por lavado de dinero en la causa «Ruta del Dinero K», alimentan las sospechas sobre un esquema de corrupción sistémica.
Próximos pasos en la investigación
El peritaje buscará aclarar si Cristina Kirchner omitió bienes, infló o subvaluó su patrimonio, o utilizó empresas como Los Sauces y Hotesur para ocultar operaciones ilegales. De confirmarse estas irregularidades, se determinarán las consecuencias impositivas y penales.
El caso podría marcar un hito en la lucha contra la corrupción en Argentina, mientras la expresidenta enfrenta un futuro político y judicial incierto. Las conclusiones del peritaje contable, que abarcará tanto bienes heredados como adquiridos, serán clave para establecer responsabilidades y esclarecer el origen de su fortuna.