En medio de un contexto de ajuste en diferentes organismos nacionales, la sede provincial del PAMI en Corrientes informó el despido de cuatro trabajadores, incluidos dos médicos de planta permanente. También fueron desvinculados dos delegados que desempeñaban funciones en las localidades de Paso de los Libres y Mburucuyá, incrementando el clima de incertidumbre entre los empleados del organismo.
Desvinculaciones en un contexto crítico
Los despidos se producen en un momento de ajustes presupuestarios que afectan a distintas instituciones públicas. La salida de los médicos de planta permanente resalta por su impacto directo en la capacidad operativa del organismo, encargado de brindar servicios esenciales de salud a los jubilados y pensionados.
Preocupación en las delegaciones
El personal de las sedes provinciales expresó temor ante la posibilidad de que se produzcan más cesantías en el transcurso del mes. «El clima laboral está muy tenso; nadie tiene certezas sobre quién puede ser el próximo», comentó un empleado de una delegación local, quien prefirió mantener el anonimato.
Impacto en los afiliados
Los despidos de los médicos podrían repercutir en la atención de los beneficiarios, especialmente en localidades como Paso de los Libres y Mburucuyá, donde los servicios ya enfrentan limitaciones. Los afiliados temen una posible merma en la calidad y rapidez de las prestaciones.
Reacciones y futuro
Hasta el momento, las autoridades del PAMI no han emitido declaraciones oficiales sobre los despidos ni sobre la posibilidad de nuevas desvinculaciones. Sin embargo, se espera que en los próximos días gremios y asociaciones relacionadas con el organismo tomen medidas para reclamar explicaciones y garantías sobre la estabilidad laboral del personal restante.
En un contexto donde la demanda de servicios médicos y sociales sigue en aumento, estas decisiones generan inquietud no solo en los trabajadores, sino también en la población más vulnerable que depende de las prestaciones del PAMI.