La organización del acto y los protagonistas.
La actividad será coorganizada por dirigentes radicales alineados con el oficialismo y los ministros Patricia Bullrich (Seguridad) y Luis Petri (Defensa). El tucumano Mariano Campero, uno de los principales impulsores del acto, explicó que la iniciativa responde al objetivo de brindar un “blindaje parlamentario” al Gobierno para garantizar la implementación de su plan económico y político.
Campero está acompañado en la organización por los diputados Luis Picat (Córdoba), Martín Arjol (Misiones), Pablo Cervi (Neuquén) y el correntino liberal José Tounier. Este grupo de legisladores, conocido por su apoyo a los vetos presidenciales contra la mejora jubilatoria y el financiamiento universitario, se posiciona como un aliado estratégico del oficialismo dentro de la Unión Cívica Radical (UCR).
Blindaje parlamentario y campaña legislativa
En declaraciones a la agencia Noticias Argentinas, Campero destacó la necesidad de garantizar una mayoría legislativa para el Gobierno:
“Estamos organizando este acto porque entendemos que debemos apoyar a este Gobierno que está logrando mejorar la economía y salir de la crisis. Es clave hacer una buena elección en octubre para darle al presidente las herramientas necesarias”.
El dirigente también se enfatizó que la prioridad es derrotar al kirchnerismo en las próximas elecciones legislativas y consolidar una mayoría parlamentaria que respalde las reformas impulsadas por el oficialismo.
El debate sobre las PASO
En línea con el discurso oficial, Campero se manifestó a favor de suspender o eliminar las elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) , argumentando que los recursos destinados a su organización podrían ser utilizados en áreas críticas como universidades o jubilaciones.
“En este contexto de crisis social, no podemos darnos el lujo de gastar recursos millonarios en las PASO. Esos fondos deben asignarse a sectores prioritarios”, sostuvo, aunque anteriormente votó a favor de los vetos presidenciales que recortaron el financiamiento para estas áreas.
Perspectivas y desafíos
El acto de febrero se perfila como un movimiento estratégico del oficialismo para reforzar su apoyo legislativo y preparar el terreno de cara a las elecciones de octubre. Sin embargo, la postura de los “radicales con peluca” ha generado críticas dentro de su propio partido, especialmente por su respaldo a medidas controvertidas como los vetos presidenciales y la posible suspensión de las PASO.
Mientras tanto, el oficialismo busca consolidar su narrativa de “reformas económicas exitosas” para contrarrestar el desgaste político y social que enfrenta, en un clima de alta incertidumbre económica y creciente descontento social.
El éxito de esta movida dependerá de su capacidad para alinear intereses internos, fortalecer su base electoral y convencer a una ciudadanía que exige resultados concretos más allá de las promesas y los discursos.
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