Las fuerzas policiales del régimen chavista han rodeado la embajada argentina en Caracas, según denuncias del Comando Nacional de Campaña de la oposición venezolana, encabezado por la proscripta María Corina Machado y el excandidato presidencial Edmundo González. Esta situación incrementa la ya elevada tensión, dado que en la sede diplomática se encuentran seis opositores que solicitaron asilo político, junto con el personal diplomático argentino que ha sido presionado por el gobierno de Nicolás Maduro para abandonar Venezuela antes del jueves.
En un mensaje publicado en su cuenta de X, el Comando Nacional de Campaña advirtió: “Atención. Fuerzas policiales del régimen rodean la embajada argentina en Venezuela. Un llamado a los vecinos a impedirlo. Alertamos al cuerpo diplomático acreditado en Venezuela”. La noche anterior, un colaborador cercano a Machado había alertado sobre la presencia de fuerzas policiales intentando tomar la embajada, acompañando su denuncia con una fotografía que mostraba un móvil policial estacionado frente al edificio.
Pedro Urruchurtu, uno de los asilados, también denunció la situación en X, señalando: “URGENTE! Funcionarios de seguridad del régimen permanecen a las afueras de la residencia de la embajada argentina en Caracas y la rodean. Buscan tomar esta sede diplomática. Alertamos al cuerpo diplomático acreditado en el país sobre esta grave violación al derecho internacional”.
El encargado de Negocios de Argentina en Caracas, Andrés Mangiarotti, lidera la delegación diplomática y se encuentra organizando el cierre de la embajada y la salida del personal argentino y de los seis opositores venezolanos asilados desde marzo. La Cancillería argentina, encabezada por Diana Mondino, está negociando con diversos países aliados para asegurar un “salvoconducto” que permita su traslado a un lugar seguro, aunque hasta ahora, el chavismo ha negado cualquier autorización para la salida.
Mientras tanto, Costa Rica ha ofrecido asilo político a los opositores venezolanos, incluyendo a Machado y González, pero estos han decidido permanecer en Venezuela, priorizando la salida segura de los seis compatriotas refugiados en la embajada argentina. La situación continúa siendo crítica, con el suministro de luz y agua cortado en la sede diplomática, en un intento de hostigamiento por parte del régimen de Maduro.
La gravedad de la situación ha llevado al gobierno argentino a buscar el apoyo de la Organización de Estados Americanos (OEA), con la esperanza de condenar las acciones del gobierno venezolano y encontrar una solución para los asilados.
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