Este miércoles a las 16, la Cámara de Diputados tendrá su última oportunidad para destrabar la Comisión Investigadora del caso Libra, que desde su fallida sesión constitutiva del 10 de junio permanece bloqueada por un empate 14 a 14 entre el oficialismo y la oposición. Si no se elige una presidencia, el juicio político contra Javier Milei volverá a escena como vía alternativa para avanzar en la causa.
La reunión será coordinada por el secretario administrativo, Adrián Pagán, designado por Martín Menem como medida transitoria ante la acefalía. Sin embargo, reina el escepticismo: ninguna de las dos fuerzas parece ceder.
Por el lado oficialista, La Libertad Avanza, el PRO, la UCR, la Liga del Interior e Innovación Federal insisten con Gabriel Bornoroni al frente. Del otro lado, Unión por la Patria, la Coalición Cívica, el Frente de Izquierda y Democracia para Siempre respaldan a Sabrina Selva, del peronismo.
La amenaza del juicio político
La oposición dialoguista –hasta ahora reticente a la vía extrema– amenaza con activar el juicio político si no se permite el funcionamiento de la comisión. “Ofrecimos salidas razonables, pero el oficialismo busca bloquear la investigación. Es hora de abrir otro camino institucional”, dijo Fernando Carbajal, de Democracia para Siempre.
En la comisión de Juicio Político, la oposición tendría mayoría, a diferencia de la paridad en Libra, y podría capitalizar la iniciativa. En ese marco, podrían citarse obligatoriamente a funcionarios y empresarios implicados, incluso con comparecencia forzada si se rehúsan.
Invitaciones y ausencias claves
Aunque la comisión convocó a Karina Milei –imputada en la causa–, a los empresarios Novelli y Terrones Godoy, y al ex titular de la CNV Sergio Morales, es poco probable que asistan. Se espera, en cambio, la presencia de periodistas como Alejandro Bercovich e Irina Hauser, y de especialistas como Santiago Siri.
Un organismo al borde de la extinción
Sin autoridades, la comisión Libra no puede solicitar medidas judiciales ni citar testigos, y su funcionamiento está legalmente atado a tener conducción. Si este miércoles vuelve a naufragar, podría considerarse disuelta de hecho.
En palabras de un legislador opositor: “La comisión nació muerta, pero aún hay tiempo de reanimarla. De lo contrario, nos veremos en el juicio político”.