En una jornada cargada de expectativa global, los 133 cardenales electores reunidos en el Cónclave 2025 aún no lograron alcanzar el consenso necesario para designar al nuevo Papa, sucesor número 267 de San Pedro. Las dos primeras votaciones realizadas esta mañana en la Capilla Sixtina resultaron inconclusas, lo que mantiene la incertidumbre en Roma y en todo el mundo católico.
Según informó Corriere della Sera, están programadas otras dos rondas de votación para esta tarde: una a las 17:30 y otra poco después de las 19. Como es tradición, el resultado se anunciará a través del humo que emerge del pequeño “comignolo” sobre el techo de la Capilla Sixtina: blanco si hay Papa, negro si no se ha alcanzado un acuerdo.
El proceso puede prolongarse durante varios días, como ha sucedido en otros Conclaves, aunque en la historia reciente —como en 2005 o 2013— las decisiones se tomaron entre el segundo y cuarto día. Hasta el momento, no ha trascendido ningún nombre con mayoría clara, y se mantienen en reserva las discusiones que se dan en el interior del cónclave, tal como dictan las estrictas normas de confidencialidad.
Mientras tanto, miles de fieles y medios de comunicación se congregan en la Plaza San Pedro, con la mirada puesta en el cielo del Vaticano y los oídos atentos por si finalmente suena el histórico anuncio: Habemus Papam.
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