Este miércoles, el peronismo se moviliza con fuerza en la Ciudad de Buenos Aires en respaldo a Cristina Fernández de Kirchner, quien ya cumple prisión domiciliaria tras la confirmación de su condena a seis años por administración fraudulenta en la causa Vialidad. El epicentro de la jornada será la Plaza de Mayo, aunque las concentraciones comenzarán desde las 10 de la mañana en distintos puntos de la capital.
El cambio de planes surgió tras la notificación del Tribunal Oral Federal N.º 2 que le permitió a la exmandataria cumplir la pena en su departamento de Constitución. En consecuencia, el Partido Justicialista (PJ) modificó la convocatoria: en lugar de dirigirse a Comodoro Py, la columna principal partirá desde la zona de su domicilio hacia la histórica plaza frente a la Casa Rosada.
Encabezarán la movilización el gobernador Axel Kicillof (con su agrupación Movimiento Derecho al Futuro) y el diputado Máximo Kirchner, líder de La Cámpora. Junto a ellos marcharán referentes sindicales, intendentes del conurbano, dirigentes de organizaciones sociales como el Movimiento Evita y Barrios de Pie, y partidos aliados como Nuevo Encuentro, Kolina y el Frente Renovador. También habrá presencia de agrupaciones de izquierda y de derechos humanos.
La Confederación General del Trabajo (CGT) se sumó al llamado, dejando libertad de acción a los gremios para decidir su forma de adhesión, incluso con posibles paros. La manifestación busca mostrar unidad y volumen político en medio de denuncias por «persecución judicial» contra la expresidenta.
El martes por la noche, Máximo Kirchner, Wado de Pedro, Mayra Mendoza, José Mayans y Teresa García encabezaron una reunión con gobernadores, legisladores, intendentes y representantes de Unión por la Patria en la sede del PJ en Matheu. El objetivo: coordinar los movimientos para una jornada que consideran clave en la defensa de su principal figura política.
La intendenta de Quilmes, al salir del domicilio de Cristina, resumió el espíritu del día: “Cristina no va a poder salir a saludar al balcón. Se ve que les molesta su sonrisa”.
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